domingo, 9 de diciembre de 2012

prosopopeya


una mujer ama su ipod. no la música que en él escucha. ama A su ipod y se enamora de él. le pone nombre. lo acaricia, cuida y limpia regularmente con afecto. nunca sale de casa sin él. sufre cuando algo le sucede y se recrimina cualquier rayón en su hermosa carcasa. jura que nunca más dejará que algo lo hiera. y duerme con él, comparte una cama y lo hace su amante. nada sexual, no malentiendan. se trata del objeto de su afecto, de ese que nunca le traicionará ni dejará. y un día el ipod se daña, no responde. y ella sufre y se siente vacía y se pone irritable. no se pierde, pero no se halla. y llora de rabia.

un hombre se define como periodista cuando le preguntan quién es. orgulloso de sí mismo, todos los días responde: soy ingeniero, soy doctor, soy el padre de, soy bachiller. soy el novio, venezolano. soy hijo de irlandeses. soy un gentilicio, soy mi trabajo y cuanto gano. y un día su trabajo cesa, lo despiden, pero la pregunta sigue siendo "¿quién eres?". se cuestiona cómo algo puede terminar así, de buenas a primeras. que más allá de la liquidación monetaria y de la causal de despido, no existen ni causas ni consecuencias. si él es gente y es su trabajo, entonces su trabajo es gente. ¿sí, no? pero la gente no se muere porque sí. el universo tiene que ser más grande y complejo. la gente no deja de existir y ya. todo es un proceso, o debería. debería, pero no. y se da cuenta de que su trabajo no es gente, que ese ente que lo definió desde hace años, que ese aura que es la profesión, que esa humanidad que lo recubría no es tal. que si su trabajo no es humano, por definición (de hecho, por carecer de ella), él tampoco lo es. y va y salta a las vías del metro.

en un cuarto un bombillo se quema solo. inexplicablemente mi clave de acceso no responde y, no sé desde cuándo, al parecer aquel reloj dejó de marcar horas. en una calle cualquiera un carro nuevo ya no anda, mientras rosas tristes mueren en un vaso. el semáforo en la avenida ya no da pausa ni da paso. en un corazón un sentimiento nace y otro mata. en una escarpada montaña, una cuerda resistente se rompe y alguien cae al vacío. su casco no funciona. un plato se escapa mientras alguien lo enjabona. 17% de las veces un preservativo no protege y, cuando el deadline se acerca, 35% de los archivos informáticos se borran. la señal satelital se va sin avisar en un día soleado, la lluvia cae e insiste en estrellarse. un órgano colapsa. un puente también. su tacón izquierdo cede mientras ella está sentada sin siquiera haber apoyado el pie. se oxida lo inoxidable. un techo sucumbe a pesar de la arquitectura. todos los días nacen para acabarse otra vez. y sólo entonces lo sabes y ellas también.

las cosas mueren al descubrir que no son humanas.